Contra Venezuela

Tristeza, rabia, pena y dolor, es lo que se siente en estos tiempos de guerra económica y crisis alimentaria, cuando ya se comenzaba a establecer una relación de entendimiento entre factores fundamentales para el establecimiento de la convivencia entre todas y todos quienes vivimos en esta casa bella llamada Venezuela.

Aún con diferencias y concepciones desde la óptica política, diferencias enteoría y practica, que en cualquier otro país se transforman en debates de altura con seriedad y madurez, así se disputan las respectivas tendencias políticas el mejor y mas claro sentido de como contribuir por una concertación a favor de las capas sociales mas desposeídas.

Lamentamos que de manera absurda, nos sorprenden con las más viles y cobardes amenazas, traiciones y oportunismo, tratando de sembrar el miedo para que se renuncie a las victorias y los logros que se han labrado con sangre, sudor y lágrimas; añadiríamos también con mucho dolor.

No se debe poner en duda que la Revolución Bolivariana Chavista, ha marcado el devenir inclusivo para las clases menos favorecidas en antiguos sistemas de Gobiernos ominosos, que solo dejaron huellas de miseria, abandono, opresión, represión y olvido. No cabe la menorduda que la amenaza contra Venezuela, se refleja en el marcado interés hacia sus riquezas naturales, siendo el país con la mayor reserva de petróleo del planeta tierra, con un potencial en minería, agua y recursos naturales renovables. No es casualidad que el imperio estadounidense y sus socios tengan el mayor interés en apoderarse de todas las riquezas del pueblo de Simón Bolívar.

Indudablemente que cuentan con aliados rastreros criollos que se confabulan de manera descarada para facilitarle el trabajo a los invasores. Esa relación permanece desde hace mucho tiempo y hasta el momento no se ha producido una separación, siendo la burguesía mantuana, la que traiciono y llevo al sepulcro a nuestro Libertador, la que hoy se reanima con bríos dolarizados e influencias que no dejan sorpresas sabiendo el modo atroz y voraz que aplican sus amos por los bienes ajenos.

Desde esa óptica apátrida, se han propuesto crear una serie de argucias con el presuntuoso libreto de la “ruina y mala gestión del Gobierno Bolivariano”, fusionando la trampa, la traición, engañando a sus adeptos y fomentando la violencia criminal contra personas, medio ambiente, ataques a la propiedad privada, bienes del Estado y públicos.

La realidad es patética; no quieren a Venezuela: La más reciente confabulación esta centrada en el sabotaje a la alimentación y artículos de primera necesidad, sin contemplaciones de sexo, edad, raza o religión, han volcado toda su furia, causando una grave distorsión física-mental en la población de bajos y medios recursos, causando angustia y desesperación, nervios, malestares y muertes principalmente entre personas de la tercera edad, ancianos y rorros.

Definitivamente estamos frente a criminales con trajes de etiqueta, que pululan por diferentes lugares en busca de alimentar sus ansias de poder a costa de lo que sea y como sea. Mostrando con esa actitud el más enconado odio contra el pueblo, que al final de todo es contra Venezuela.

Agustín Ruiz

Publicado en El Oriental 16 septiembre de 2016